Esta movilización se da en un contexto en el cual los ataques de la oposición y sobre todo de la gran prensa corporativa no cesan un solo día en las tergiversaciones, las mentiras y un ataque cotidiano a la figura del presidente Gustavo Petro y a su círculo más cercano. Cualquier error es capitalizado por esa gran prensa corporativa que día a día no cesa en sus virulentos ataques en medio de estrategias que requieren tiempo para su maduración frente a las cuáles no cesan las mentiras y los ataques. Una de ellas es la estrategia de la paz total que requiere tiempo para su materialización.
Los grupos armados ilegales tanto aquellos que dicen tener motivaciones políticas como el Ejército de Liberación Nacional, ELN, o las Disidencias de las Farc autodenominadas Estado Mayor Central y la Segunda Marquetalia avanzan en sus negociaciones con el Gobierno Nacional pero no cesan en su confrontación con otras organizaciones ilegales o en la confrontación con las Fuerzas Armadas. Solo el ELN ha mantenido en términos generales la tregua pactada bilateralmente y antes de que se inicie el cese al fuego bilateral con las Disidencias de las FARC que lidera Iván Mordisco, esta guerrilla lanzó demenciales ataques en Jamundi en el Valle del Cauca y en el Departamento del Cauca, en las cuales murieron varios civiles ajenos por completo a la confrontación armada.
Todo ello es explotado por la gran prensa para pintar y exagerar un deterioro del orden público, que sí se ha deteriorado, pero no en la magnitud que quieren mostrarlo los grandes medios de comunicación y algunas autoridades sobre todo departamentales en medio de una campaña electoral que está en pleno desarrollo. Los acuerdos del cese al fuego bilaterales ahora también pactado con las Disidencias de las FARC deben traer un alivio en las regiones azotadas por el conflicto armado, pero los equipos negociadores deberán hacer un esfuerzo para que cese la confrontación armada entre estos grupos ilegales en regiones como Arauca, donde esa confrontación es entre el ELN y las Disidencias de Iván Mordisco o en la confrontación del ELN y el Clan del Golfo en el Chocó donde es más difícil pues no hay acuerdos entre el Gobierno Nacional y este grupo paramilitar. Esas son las dificultades mayores que afrontan estos procesos al tiempo que no se avanza en el Congreso en la discusión del marco jurídico para el sometimiento de las bandas armadas ligadas con el narcotráfico. Este marco jurídico es necesario para avanzar en las negociaciones con el Clan del Golfo y con las bandas armadas ligadas al narcotráfico en varias ciudades del país. Por lo pronto para esas negociaciones en Medellín, Buenaventura y Quibdó.
El otro gran reto que tiene el gobierno es el de acelerar la inversión, el gasto público. La ejecución presupuestal estaba muy baja al terminar el mes de agosto en frentes claves como agricultura sobre todo en el rubro de compra de tierras así como en la política de vivienda que es clave si se quiere mejorar el crecimiento económico interno así como en otros programas como el de las rentas condicionadas donde se requiere que, la depuración de las bases de datos, se haga muy bien pues no es posible que por ejemplo para el caso de Bogotá se hayan retirado del programa de Familias en Acción a 161 mil familias, estos ajustes deben hacerse bien sin lesionar a familias que requieren de estas transferencias monetarias en un país empobrecido por las malas políticas que se pusieron en marcha frente a la pandemia del Covid. Así mismo se requiere avanzar bien en la construcción de la infraestructura de salud para la cual hay recursos destinados en el presupuesto nacional, así como avanzar en la formalización laboral del sector público. Acelerar la inversión pública es absolutamente necesario y avanzar en la coordinación interna del gobierno. Se requiere cohesionar el equipo de gobierno para avanzar. El presidente debe ser consciente que requiere de un jefe de gabinete que articule. Eso no da espera.
Así pues, en medio de esta difícil coyuntura económica internacional se requiere que la inversión pública fluya bien, pero con premura.
Impulsar la organización popular
Las reformas propuestas por el gobierno en materia de salud, pensiones, educación y laboral, que son las que se encuentran estancadas en el Congreso de la República requieren de sujetos que las apropien y defiendan. Tardíamente, pero de manera acertada las agencias adscritas al ministerio de Agricultura entendieron que se requiere de organización campesina sólida y fuerte. No habrá reforma rural si los campesinos no se organizan. Se han desarrollado encuentros masivos para promover la organización campesina de base municipal. Miles de campesinos vienen participando en los encuentros departamentales promovidos desde el ministerio de Agricultura. Las múltiples y débiles organizaciones campesinas deben entender que se requiere de una Unidad de Acción alrededor de un programa mínimo que bien puede ser el de las conclusiones de la Convención Nacional Campesina que se reunió en diciembre del año 2022 y que logró crear una Mesa de Unidad Agraria en donde están las organizaciones campesinas existentes. Pero también el gobierno debe entender que debe acelerar la aprobación de los decretos que le dan reconocimiento a esa mesa de Unidad Campesina, así como el decreto que garantiza la representación campesina en diversos organismos encargados del desarrollo rural y de la reforma rural integral, así como el decreto para el fortalecimiento y reconocimiento de las organizaciones campesinas.
Otros ministerios deberían seguir el ejemplo del ministerio de Agricultura sobre todo las reformas pensional y laboral. Se requiere multiplicar los espacios de presentación y discusión de los textos de las reformas. En materia de salud existe una amplia organización que reúne a cientos de organizaciones del sector que viene desarrollando esa actividad sin ningún respaldo del gobierno actual en esa materia. Me refiero a la Cumbre Social y Política por la Reforma Estructural al Sistema de Salud que ha dado una muestra de su representatividad en las cinco mesas de trabajo que abrió la subcomisión creada en la Cámara de Representantes para volver a discutir la ponencia de reforma al sistema de salud. Esta Cumbre viene realizando diversos eventos en todo el país de explicación y discusión de la reforma. Esto no debería ser solo en salud sino en todas las reformas que el gobierno ha presentado a consideración del Congreso de la República.
Es la hora del respaldo y fortalecimiento de las organizaciones de la sociedad civil. Se requiere un gran esfuerzo de trabajo con las bases sociales para mejorar la correlación de fuerzas. Las organizaciones deben entender que hoy se requiere de la unidad alrededor de los mínimos que son los contenidos de los proyectos presentados por el Gobierno Nacional a consideración del Congreso de la República. Es la hora del fortalecimiento de las organizaciones sociales. El Gobierno Nacional debería entenderlo.
Pedro Santana Rodríguez, Director Revista Sur
Foto tomada de: Instagram Gustavo Petro
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