• Desde el sur
  • Sur global
  • El sur posible
  • Archivo Revista Sur
  • Video
  • ESPECIAL SOBRE BOGOTÁ
  • SUR COOPERANDO

Corporación Latinoamericana Sur

  • INICIO
  • NOSOTROS
    • Quienes somos
    • Qué hacemos
    • Nuestro Equipo
  • TEMÁTICAS
    • Participación y cultura política
    • Paz, Desarrollo Social y Postconflicto
    • Jovenes
    • Victimas
    • Salud
    • Derechos humanos
    • Democracia y ciudadania
    • Ciudades Equitativas – Territorios Equitativos
  • Publicaciones
  • Contáctenos

La exitosa estrategia política de López Obrador

12 febrero, 2024 By Carlos Jimenez Leave a Comment

PDF
Imprimir
La difícil situación política que atraviesa actualmente el progresismo en nuestra América contrasta con fuerza con los avances y los logros del proyecto político de Andrés Manuel López Obrador, líder de Morena y actual presidente de México. Lo comprueban las estadísticas: las encuestas más recientes le conceden un índice de popularidad cercana al 60% al cabo de cinco años de ejercicio del cargo, con el que no se atreven siquiera a soñar Gabriel Boric en Chile o Luis Arce en Bolivia, a pesar de que llevan mucho menos tiempo que ellos en la presidencia la república. Popularidad lograda a pesar de los medios hegemónicos que no han dejado pasar ninguno de los días de su mandato sin criticar su gestión con razón, en algunas ocasiones y sin razón en la mayoría abrumadora de los casos. El parlamento tampoco se lo ha puesto fácil. La alianza de los representantes del PRI y del PAN ha bloqueado con frecuencia sus iniciativas legislativas y el poder judicial las ha echado abajo cuando han salido adelante mediante decisiones y fallos que rozan la ilegalidad cuando no la han trasgredido directamente. La intelectualidad liberal también se opone porque le irrita que López Obrador reivindique sin desmayo la soberanía popular y defienda sin fisuras la independencia nacional. Ambas afirmaciones les resultan anacronismos intolerables en un mundo que creían irremediablemente globalizado y que, por lo tanto, había superado inevitablemente la forma política Estado nación. Los ecologistas por su parte no se han abstenido de criticar sus mega proyectos de obras públicas porque consideran que tienen un impacto medio ambiental negativo. Como es caso paradigmático del Tren Maya.

La actual Constitución política de México es esta otra barrera impuesta en el propósito declarado por López Obrador de desmantelar el oprobioso régimen económico y social impuesto al país por el neoliberalismo. Dicha Constitución es el resultado de las reformas de la misma promovidos por los anteriores gobiernos del país con el fin de consagrar el programa estratégico del neoliberalismo: libre comercio, apertura irrestricta a las inversiones extranjeras, privatización de la banca, los bienes y empresas públicas, desmantelamiento de la legislación laboral, reforma tributaria regresiva, etcétera. Por lo que ha servido tanto para constreñir las iniciativas legislativas de López Obrador como para apoyar las declaraciones de inconstitucionalidad proferidas por el Tribunal supremo de Justicia.

No acaba aquí la lista de factores adversos a la política de la 4 Transformación, como llama a la suya López Obrador. En referencia a las que considera las tres anteriores: la independencia nacional, la derrota del Imperio clerical de Maximiliano y Carlota por Benito Juárez y la revolución de 1910. A todos los factores enumerados hay que añadir la ruina de la agricultura tradicional debida a la competencia desleal de la todopoderosa agroindustria norteamericana que acarreó la miseria del campesinado, su emigración masiva a los Estados Unidos o su enrolamiento en los ejércitos de los carteles de la droga. Carteles que irrumpieron en la escena nacional gracias a la “guerra contra el narcotráfico” declarada por el gobierno de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) y proseguida con ahínco por todos sus sucesores. Carteles que han alcanzado tal poder que han sido capaces de corromper y ensangrentar al país hasta niveles verdaderamente insoportables y de desplazar y subordinar a sus intereses a los carteles colombianos.

López Obrador ha sabido sin embargo sortear con un éxito no desdeñable esta explosiva acumulación de adversidades. Para empezar porque él puede hacer suya la respuesta que el dirigente venezolano José Vicente Rangel dio a quien dudaba que el gobierno de Hugo Chávez pudiera afrontar con éxito las elecciones presidenciales de la época: “No lo dude, nosotros somos hijos de todas las derrotas”. Porque derrotas no han faltado en la larga y obstinada carrera política de López Obrador, desde que la inició hace cuatro décadas. La última, que en su momento pareció definitiva, el escamoteo de su victoria electoral en las elecciones de 2012, que permitió a Enrique Peña Nieto hacerse con la presidencia de México.

La otra razón de su éxito es que a sabiendas o no ha hecho suya la plegaria del teólogo Reinhold Niebuhr: “Señor dadme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las que sí puedo cambiar y sabiduría para reconocer la diferencia”. Si la Constitución le impedía nacionalizar la banca, como lo hizo en su día el presidente López Portillo, creo el Banco de Bienestar y puso al Ejército a construir más de cuatro mil sucursales del mismo en todo el país. Si la Constitución le prohibía nacionalizar el petróleo como lo nacionalizó el general Cárdenas, saneó las finanzas de PEMEX, compro una refinería en Texas y construyó la refinería de 2 bocas, duplicando así el porcentaje de participación pública en la producción de hidrocarburos y derivados. Si el Tribunal supremo objeto una y otra y otra vez la construcción del Tren Maya, la declaró garantía de la seguridad nacional y empleó al Ejército y a sus ingenieros para construirlo. Como construyeron el tren del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec para conectar el océano Atlántico con el Pacifico. Si el Big Pharma y sus intermediarios mexicanos imponen precios muy altos a los medicamentos, él ordenó la construcción de una mega farmacia destinada a abastecer de medicinas a todos los hospitales y centros de salud del país. Si los medios estaban por sistema en su contra, abrió la Mañanera, la comparecencia matinal ante la prensa en la que examinó y examina diariamente el estado del país y da su opinión sobre los problemas que lo afectan en todos los órdenes.  Lo hace, además, con un estilo llano, coloquial, pausado, que contrasta claramente con la exaltación verbal de muchos lideres populares. O que pretenden serlo.

López Obrador además ha incrementado los presupuestos de educación y salud y ha puesto en marchas programas de bienestar que benefician con ayudas, becas y subsidios a desempleados, estudiantes y mayores de 65 años. Y si ha hecho todo esto y más sin recurrir al endeudamiento externo es porque se ha tomado en serio la tan llevada y traída por los corruptos “lucha contra la corrupción”. La suya se ha centrado en que las grandes empresas, nacionales y extranjeras, paguen lo que les corresponde. Utilizando los recursos de que dispone la hacienda pública consiguió, por ejemplo, que los tres más grandes deudores pagaran a cerca de 100.000 millones de pesos que debían de impuestos. O sea, más de 5 mil millones de dólares.

Contando con estos logros y con los altos índices de popularidad alcanzados, López Obrador aborda la campaña presidencial actualmente en curso. Él apoya abiertamente a Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena, su partido, pero está haciendo más: ha presentado un proyecto de reforma constitucional de 10 puntos que amplían y dan fuerza de ley al que ha sido su programa de gobierno. Con él espera no solo contribuir significativamente al triunfo electoral de Sheinbaum sino lograr la incontestable mayoría parlamentaria que le permita desmontar el actual blindaje constitucional del modelo neoliberal.

Carlos Jiménez Moreno

Foto tomada de: Gobierno de México

FacebookTweetLikeShareLinkedInEmail

Filed Under: Revista Sur, RS Desde el sur

Deja un comentario Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sur Global

La batalla por el alma del laborismo. Sin la izquierda, el Partido Laborista no tiene nada que ofrecer

16 junio, 2025 By Grace Brakeley Leave a Comment

¿Podemos reconstruir partidos políticos de afiliación masiva?

16 junio, 2025 By Jared Abbott Leave a Comment

La colisión entre Israel e Irán amenaza con una guerra total en Oriente Medio y solapa el genocidio en Gaza

16 junio, 2025 By JUAN ANTONIO SANZ Leave a Comment

El Sur posible

Ideas verdes

3 abril, 2019 By Carolina Corcho 2 Comments

Suscribirse a la Revista Sur

VIDEO RECOMENDADO

Fue archivado el proyecto de Ley 010 de Reforma a la Salud

https://www.sur.org.co/wp-content/uploads/2021/05/VID-20210519-WA0024.mp4

Dra. Carolina Corcho Mejía, Presidenta Corporación Latinoamericana Sur, Vicepresidenta Federación Médica Colombiana

TEMÁTICAS

  • Participación y cultura política
  • Paz, Desarrollo Social y Postconflicto
  • Jovenes
  • Victimas
  • Salud
  • Derechos humanos
  • Democracia y ciudadania
  • Ciudades Equitativas – Territorios Equitativos
  • Publicaciones

Ultimos articulos

  • El rechazo de los poderes tradicionales a la Consulta Popular
  • Democracia y genocidio
  • El renacimiento del campo: uno de los mejores logros para hacer de Colombia una Potencia Mundial de la Vida
  • Violencia, política y cultura
  • España: salida republicana a un reino corrupto

Etiquetas

Acuerdo Agro Amnistia Brasil Cambio Climatico Campo Catalunya Ciencia y Tecnología Conflicto Colombia Corrupción crisis capitalismo Democracia Derecho al agua Derechos Humanos Economía Ecuador Educación Elecciones Colombia ELN España Fast Track Iglesia Justicia Justicia de paz Medio ambiente Mineria Negociación Neoliberalismo Participación Paz PND Pobreza Politica Politica EEUU protesta social reforma Reforma tributaria religión Renegociación revolucion salud Terrorismo Trump Venezuela Victimas

Apoyo SUR

Buscar

Director: Pedro Santana

 

 

 

Copyright © 2025 Todos los derechos reservados - Corporación Latinoamericana Sur ·