En el año de 1967 se libró la llamada guerra de los seis días que enfrentó a Israel con la llamada coalición árabe conformada por Egipto, Siria, Jordania e Irak entre el 5 y el 10 de junio y que culminó con la derrota militar de esta coalición y llevó desde entonces a la ocupación de otra parte de los territorios de Palestina que fueron y siguen siendo ocupados por colonos israelitas que permanecen protegidos por el ejército de Israel. Esta guerra les permitió ocupar la península del Sinaí, la franja de Gaza, Cisjordania, Jerusalén Este, incluyendo la ciudad vieja y los Altos del Golán. Otro cercenamiento del territorio palestino. Los palestinos fueron expulsados de dichos territorios y confinados en Cisjordania y sobre todo en la franja de Gaza. En los Acuerdos de Oslo a cambio del reconocimiento del Estado de Israel por los palestinos y de la Organización de la Liberación de Palestina por Israel, se acordó un proceso de negociación de cinco años que debería culminar con el reconocimiento del Estado de Palestina dentro de las fronteras definidas en 1948. Estas negociaciones nunca se llevaron a cabo tras el asesinato del primer ministro de Israel, Isaac Rabin y firmante de los acuerdos por parte de un extremista judío que frustró dicho proceso. En el año 2000, Ariel Sharon invadió las explanadas de las mezquitas en Jerusalén, uno de los tres lugares sagrados del Islam, con lo cual se incrementó la apropiación de las tierras de palestinas por colonos judíos.
Palestina es una nación sin Estado ni fuerzas armadas. Después del ataque de Hamás el 7 de octubre el ejército de Israel ha sometido a un bombardeo incesante y sin tregua a Palestina y sobre todo a la franja de gaza donde en 360 kilómetros cuadrados viven dos millones de palestinos. Allí desde hace por lo menos 17 años viven confinados en una verdadera cárcel a cielo abierto. El más brutal ataque se produjo contra el Hospital Bautista Al-Ahli de Gaza este martes 17 de octubre donde fueron asesinados 471 pacientes y personal del hospital dejando además 300 heridos. En total han muerto en estas operaciones 3.785 palestinos (1.525 son niños, 1.000 mujeres y 120 ancianos), 12,493 heridos a la fecha de hoy. El régimen sionista fascista de Israel ha dejado a la región sin agua, ni medicamentos, ni alimentos, la única gestión positiva de Biden en su visita de respaldo a Israel fue la apertura de un corredor humanitario desde Egipto para la entrada de medicamentos y ayuda humanitaria.
El ataque de Hamás a Israel tendrá consecuencias y repercusiones en la región y en la confrontación con Israel. Lo primero fue demostrar que los cuerpos de inteligencia de Israel no son inexpugnables. Las barreras de seguridad espacial y terrestre llamada “Escudo de Hierro” fueron burlados por las milicias de Hamás. Lo que repercutirá en que por primera vez la población de Israel se sentirá insegura, teniendo en cuenta que además cerca de dos millones de palestinos viven en su territorio. Un segundo elemento importante es que demostró que el ejército de Israel no es invencible y no está preparado para una guerra de guerrillas urbana. Un tercer efecto es que la llamada normalización de las relaciones de Israel con sus vecinos árabes que estaba en marcha con el reconocimiento del Estado de Israel por Arabia Saudita se detendrá y no se establecerán relaciones diplomáticas. Un cuarto elemento es que la causa palestina se reposiciona en todo el mundo árabe. Crecerá el cerco por todos los flancos contra Israel. Un quinto elemento es que los Estados Unidos en plena decadencia y en crisis de su hegemonía única se verá confrontado al conjunto de países de la región. En un momento en que la crisis provocada por la guerra de Ucrania donde es claro que los rusos van ganando la guerra, así como con el ascenso de la confrontación con China, los Estados Unidos son un hegemón en crisis y cada vez se hunde más. La multipolaridad es lo que se abre paso y este genocidio del Estado de Israel contra el pueblo de Palestina y el respaldo irrestricto de Estados Unidos al régimen sionista fascista de Israel lo hundirá más en su crisis por la hegemonía mundial.
Lo cierto es que el genocidio en marcha contra el pueblo de Palestina ha levantado la solidaridad mundial de los sectores democráticos que se han expresado en movilizaciones multitudinarias tanto en Estados Unidos como en Europa, Asia, África y América Latina. La exigencia es al cese al fuego, a la negociación política y al reconocimiento de dos Estados, el de Israel y el de Palestina. Solo con una negociación se podrá construir una paz en dicha región sobre la base del reconocimiento de los derechos del pueblo Palestino.
Es cierto que las acciones de Hamás del 7 de octubre fueron un acto terrorista y debe ser condenado, pero a ese acto se llega por el autoritarismo del Estado sionista fascista de Israel que ha sometido al pueblo Palestino a toda suerte de vejámenes. Tiene razón entonces el presidente Gustavo Petro al solidarizarse y exigir que cese el genocidio del pueblo Palestino por el Estado de Israel al tiempo que se establezcan negociaciones que lleven al reconocimiento del Estado Palestino en las fronteras definidas en 1948. Petro debió condenar sin ambigüedades el ataque terrorista de Hamás lo cual no invalida la reivindicación de la causa Palestina. Nos parece un exabrupto la respuesta de Israel a la postura del presidente de la República. Hay que detener ya el genocidio del pueblo palestino. Solo la movilización mundial y la condena al régimen sionista fascista del Estado de Israel lo podrá lograr.
Pedro Santana Rodríguez, Director Revista Sur
Foto tomada de: France 24
La verdad no había visto un resumen tan bueno sobre el conflicto entre Palestina e Israel. Felicitaciones a Sur y a Pedro Santa
Con estai lectura del texto tan bien llevado e “ilustrado” quedó informado en cuanto al conflicto palestino Israeli. Gracias apreciado y muy respetado Pedro Santana Rodríguez.