• Desde el sur
  • Sur global
  • El sur posible
  • Archivo Revista Sur
  • Video
  • ESPECIAL SOBRE BOGOTÁ
  • SUR COOPERANDO

Corporación Latinoamericana Sur

  • INICIO
  • NOSOTROS
    • Quienes somos
    • Qué hacemos
    • Nuestro Equipo
  • TEMÁTICAS
    • Participación y cultura política
    • Paz, Desarrollo Social y Postconflicto
    • Jovenes
    • Victimas
    • Salud
    • Derechos humanos
    • Democracia y ciudadania
    • Ciudades Equitativas – Territorios Equitativos
  • Publicaciones
  • Contáctenos

Periodistas en Colombia: ¿Amanuenses del poder?

1 marzo, 2021 By German Ayala Leave a Comment

PDF
Imprimir
En reciente columna, Jorge Gómez Pinilla se preguntó: el periodismo, ¿para qué? Y aunque dio pistas que bien podrían servir para responder el interrogante, en esta columna intento entregar otros con los que se pueda dar respuesta, por lo menos momentánea, a la sustancial pregunta.

Lo cierto es que el periodismo colombiano deviene en una profunda crisis de credibilidad, por lo menos en esferas sociales cuyos miembros cuentan con algún capital social y cultural que les permite hacer disquisiciones que desembocan no solo en preguntas como la señalada, sino en cuestionamientos directos a las empresas mediáticas y a los periodistas que vienen cubriendo hechos públicos, desde intereses corporativos, personales y políticos.

En otras esferas de la sociedad subsisten millones de colombianos que creen a pie juntillas en lo que dicen noticieros como RCN, Caracol y CM&, para señalar a los más afectos al Régimen de poder. Esos colombianos, carentes de capacidad para controvertir el discurso noticioso, son los mismos que dijeron NO en el plebiscito del 2 de octubre de 2016. Son los mismos que creyeron en enunciados como el “rayo homosexualizador y le van a entregar el país a las Farc” (a lafar, diría ÉL).

Con semejante niveles de estulticia, el periodismo sirve a los propósitos de lo que se conoce como el uribismo, que no es nada más que el conjunto de prácticas dolosas, engañosas, maliciosas y mafiosas (Ethos mafioso) derivadas o asociadas a la vida pública de Álvaro Uribe Vélez.  Por esa vía, el periodismo que hacen o practican en los noticieros nombrados, a los que se suma el de los medios EL TIEMPO y Semana, claramente está al servicio del criminal establecimiento colombiano.

Ahora bien, ese tipo de periodismo militante, al servicio de la derecha y la ultraderecha, constituye un remedo de lo que deontológicamente se espera que se haga desde el bello oficio. Y consecuentemente, los que escriben e informan desde esas casas periodísticas no pueden llamarse periodistas. Son también un calco, un remedo o una imitación. Son, en el mejor de los casos, estafetas, amanuenses, mandaderos o pendolistas.

Así las cosas, el para qué del periodismo se expone con claridad: para servirle a los poderosos y por esa vía, para engañar a las audiencias, en particular, a los millones de ignorantes, indoctos e ignaros que creyeron y aún creen no solo en lo que dicen aquellos estafetas, sino en lo que las fuentes oficiales salen a vociferar al medio día o en la noche.

No pueden ser más miserables e inconvenientes esas circunstancias en las que opera el periodismo colombiano, en aras de buscar la verdad y generar una opinión pública crítica y capaz de comprender la complejidad de lo que sucede en este país. Para fortuna de esos sectores sociales que gozan de un capital social y cultural que les permite dudar y controvertir los hechos noticiosos y la realidad política, existen las redes sociales, blogueros y los medios alternativos. Espacios que crecen y se fortalecen cada día más, a pesar de las afugias económicas de sus editores y responsables.

Le corresponde a la Academia, en particular a los profesores y estudiantes de las facultades de periodismo y comunicación social, analizar los tratamientos periodístico-noticiosos que vienen haciendo o dando esos medios y periodistas oficialistas y afectos al régimen de Duque. Esa tarea analítica debe servir a varios propósitos: 1. Demostrar con suficiencia que efectivamente hay periodistas estafetas al servicio de los poderosos. 2. Responder a la pregunta que echó a rodar Gómez Pinilla, y decidir si al terminar de estudiar la carrera, quieren parecerse a esos colegas vedettes que optaron por venderse al mejor postor. Y 3. Consolidar la condición de ciudadano que suelen obviar los periodistas y los estudiantes de periodismo, al creer que dejando de actuar como tales, informarán con <<objetividad>>.

Quizás el conseguir dinero y fama sea lo que motive a tantos periodistas a aceptar ser estafetas o mandaderos. Podrán lograr eso y quizás una embajada y millonarios contratos, pero jamás tendrán el reconocimiento como Periodistas acuciosos, serios y responsables con su país, de esa parte de la sociedad que de tiempo atrás sabe que actúan como periodistas incorporados. Al final, dejo esta pregunta para los estudiantes de periodismo: ¿Quieren ser amanuenses del poder o ser realmente una forma de poder?

Germán Ayala Osorio, comunicador social- periodista y politólogo

Foto tomada de: rcnradio.com

FacebookTweetLikeShareLinkedInEmail

Filed Under: Revista Sur, RS Desde el sur

Deja un comentario Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sur Global

El plan económico maestro de Donald Trump

5 mayo, 2025 By Yanis Varoufakis Leave a Comment

Cien días de Trump: una campaña de destrucción en terreno abonado

5 mayo, 2025 By Sebastiaan Faber Leave a Comment

La oligarquía tecnológica en 100 días

5 mayo, 2025 By Silvia Ribeiro Leave a Comment

El Sur posible

Ideas verdes

3 abril, 2019 By Carolina Corcho 2 Comments

Suscribirse a la Revista Sur

VIDEO RECOMENDADO

Fue archivado el proyecto de Ley 010 de Reforma a la Salud

https://www.sur.org.co/wp-content/uploads/2021/05/VID-20210519-WA0024.mp4

Dra. Carolina Corcho Mejía, Presidenta Corporación Latinoamericana Sur, Vicepresidenta Federación Médica Colombiana

TEMÁTICAS

  • Participación y cultura política
  • Paz, Desarrollo Social y Postconflicto
  • Jovenes
  • Victimas
  • Salud
  • Derechos humanos
  • Democracia y ciudadania
  • Ciudades Equitativas – Territorios Equitativos
  • Publicaciones

Ultimos articulos

  • La Consulta Popular una escuela de formación política
  • Sin auditoria forense no hay solución al gasto en salud
  • México ¿estado 52?: Morena ante el espejo
  • La defensa hemisférica y el América First
  • Reforma laboral y democracia

Etiquetas

Acuerdo Agro Amnistia Brasil Cambio Climatico Campo Catalunya Ciencia y Tecnología Conflicto Colombia Corrupción crisis capitalismo Democracia Derecho al agua Derechos Humanos Economía Ecuador Educación Elecciones Colombia ELN España Fast Track Iglesia Justicia Justicia de paz Medio ambiente Mineria Negociación Neoliberalismo Participación Paz PND Pobreza Politica Politica EEUU protesta social reforma Reforma tributaria religión Renegociación revolucion salud Terrorismo Trump Venezuela Victimas

Apoyo SUR

Buscar

Director: Pedro Santana

 

 

 

Copyright © 2025 Todos los derechos reservados - Corporación Latinoamericana Sur ·